19 de marzo de 2010

Vivir duele

Estar viva y consciente me duele
quisiera ser el aire de la obra de un poeta
vivir en un cielo divino o atrapada en mar de tormentas
pero en ambas no...

¡Así no!
Tan consciente que me enferme de realidad
y estornude injusticia y desdén, ¡no!

Esta enfermedad me carcome por dentro
me convierte en el hierro que se herrumbra con el mar de mis ojos
y que lentamente derrumba todos mis conocimientos

Al vivir permito al tiempo asfixiar cada día más mi inocencia
¿Quién seré cuando conozca mi muerte?
Querrá llevarme al cielo luego que el tiempo hizo de mi piedra pulida

Vida, tiempo
¿Acaso no todos somos tiernos, maduros y podridos en sus crueles manos?
Cultivando pasiones que apuñalan el entendimiento
y hacen cuestionar la vida misma
la vida cruel, injusta
maldita y bendita de verdad

Vivir duele... y mucho

3 comentarios:

Pablo Muñoz dijo...

con todo el dolor, pese a todas las huellas que carcome nuestra existencia esta enfermedad del presente, siempre creo que habría valido la pena vivir. Enfermarse de vida. Embriagarse de sufrimiento. Pues, ¿quien podrá relatar todos los caminos recorridos? ¿en donde quedará todas las enseñanzas que el presente de nuestra vida se encarga de hacer día a día? ¿como aseguramos que aquel rayo de luz que impregna nuestro corazón de alegrías pueda ser conservado a salvo de toda mancha que lo pueda contaminar de dolor y desesperanza?
Vivir, pese a todo, es un regalo. Sea como sea, pese a todos los dolores, tenemos que aprovecharla. Antes que ella se aproveche de nosotros llevándonos a la muerte.
saludos!

Alejandro C. Trejos C. dijo...

Eso compa, animate a escribir mas

Pablo Vargas dijo...

Muchas veces me encontrado en medio de la oscuridad pensando lo mismo que hoy has escrito, la vida es dura, cruel, y despiadada, pero merece ser luchada, con todo, con el alma, con la piel, con los dientes, porque aunque duela, la vida es hermosa...

Animo amiga, sigue escribiendo, me encanta leerte, y de paso disculpa la ausencia, las vueltas de la operacion, el trabajo y estar sin compu nos tuvieron alejados varias semanas, pero ya que pusimos internet en la casa, nos seguiremos leyendo más seguido. Un enorme abrazo!

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